Después de dos años y medio de construcción, The Brooklane ha abierto sus puertas al público. The Brooklane se ha mantenido en secreto durante sus etapas de construcción debido a que ha sido desarrollado en uno de los callejones más hermosamente escondidos en San Miguel. La propiedad está ubicada en el Callejón de Volanteros, a un par de pasos del Jardín Principal (en donde se encuentra la Parroquia). A diferencia de la mayoría de otros hoteles pequeños de San Miguel, las calles que conducen hacia The Brooklane se encuentran suavemente cuesta abajo lo que hace que los puntos de interés sean rápidamente accesibles. Este hotel de cinco habitaciones, al que nos gusta llamar hogar, fue diseñado por el arquitecto estadounidense Harold Forster Van Dine, quien además de construir varias propiedades residenciales en San Miguel y Estados Unidos, fue parte del diseño del primer World Trade Center de la mano de Minoru Yamasaki.
El diseño de interiores, que incluye la manufactura de mobiliario a la medida, fue orquestado por estudiobtr. El diseñador, nativo de Miami, Florida, quiso traerse un poco de su ciudad costera hacia esta pequeña población enclavada en el corazón de México. El entorno, que apela a un oasis, hace notar cómo las plantas que The Brooklane alberga no se asocian con el clima San Miguelense. Así mismo, el espacio se desprende del tradicional estilo colonial asociado con la ciudad y en cambio, la arquitectura y el diseño de interiores homenajean al arquitecto modernista más prolífico de México, Luis Barragán.
Diseñado para ser el espacio de inmersión que necesitas, The Brooklane ofrece una experiencia auténtica mezclada con las culturas de Miami, Nueva York y San Miguel. Desde el momento de llegada, nuestros huéspedes son recibidos por un diseño sofisticado que combina las cultura de estas tres ciudades en donde los dueños del hotel han vivido. La colección ecléctica de piezas de arte da la sensación de estar pisando las salas de un museo. Dicho esto, The Brooklane lidera una nueva iniciativa artística en donde artistas de todo el mundo son reunidos en este espacio. Nuestros huéspedes tendrán la oportunidad de convivir con ellos al tiempo que piezas únicas son creadas para más adelante ser expuestas en el nicho artístico que fue especialmente creado para mostrar exhibiciones temporales.
La experiencia culinaria la provee nuestra Chef Ejecutivo, Estéban Betancourt, que gracias a la experiencia adquirida a través de sus viajes por el mundo, puede reunir sabores mediterráneos, latinoamericanos y franceses creando entonces un menú muy singular. Las amenidades al hospedarse en The Brooklane incluyen, desayuno diario, té de media tarde, café servido con nuestro biscotti de la casa, una piscina para refrescarse del caluroso clima San Miguelense, un relajante estanque koi para perderse en el nado de los peces y un cóctel de bienvenida.
